NO NOS DESENTENDAMOS
MISION OBRERA, Acción Católica Obrera (ACO), la Juventud Obrera Cristiana (JOC), los curas obreros, la Acción Católica de la Infancia (ACE) y los curas y religiosas en los barrios obreros; 06/11/05
EVERUX (FRANCIA).
ECLESALIA, 10/11/05.- Al día siguiente de los graves sucesos que tuvieron lugar en el barrio de la Madeleine de Évreux, sentimientos de miedo, asombro e incomprensión por tales sucesos se impusieron en el ambiente. Desde esa noche mi mujer está enferma. ¿Cómo se ha podido llegar a todo esto! Nosotros somos pobres. La gente a los que han quemado los coches tiene deudas que pagar. ¿Cómo van a ir a trabajar al día siguiente?
Vecinos de este barrio comprometidos en la vida asociativa local nos hemos reunido en la sede de los movimientos y grupos de la Misión obrera de Evreux e inspirados por nuestra fe en un Dios que es amor, justicia y paz declaramos:
¿Porqué tanta violencia? ¿Porqué tanta incomprensión? Después de las revueltas de esta noche en la Magdalena todos estos porqués nos invaden y nuestros labios explotan diciendo: ¿Mi hijo han enviado una docena de curriculums vitae y nadie le ha contestado (una mujer árabe). En los grupos de viviendas de la administración donde vivimos hemos hecho una solicitud para que la puerta esté siempre cerrada y cedan un local donde los jóvenes puedan reunirse y hemos recibido la callada por respuesta. Disminuyen cada vez más las subvenciones a las Asociaciones de la Madeleine y va todo el dinero al centro de la ciudad. Nos aseguran que van a invertir millones en la Madeleine pero no nos dicen cómo van a ayudar a los jóvenes
Todos nos interrumpimos diciendo cómo aumenta más y más la pobreza y la miseria en el barrio. Los jóvenes tienen el sentimiento de que nadie les necesita, que son demasiados y que su única perspectiva es la precariedad y la marginación. Los discursos oficiales no tienen ningún crédito. Se ha roto el diálogo con la policía y con todo lo que tiene algún cariz de autoridad como son los padres, profesores, administración... Todas personas que tienen contacto con los jóvenes pueden comprender la violencia de que son víctimas.
No se puede justificar la violencia cualquiera que sea y venga de donde venga. Los que cometen estos actos deben ser condenados. Nosotros sufrimos al ver anulada la labor de todos los que trabajan en las redes de asociaciones y la diversidad cultural, que es una riqueza.
NO A LA VIOLENCIA. SÍ AL DIÁLOGO
Nosotros decimos a los jóvenes: ¡Basta ya! ¡Parad! Tenéis el peligro de ser víctimas de esta violencia. Estamos dispuestos a hablar con vosotros. En este barrio de la Madeleine hay mucha gente que está dispuesta a ayudaros.
Nosotros los adultos no nos desentendamos y sobre todo no metamos en el mismo saco y culpabilizando a todos los jóvenes. Como dice uno de ellosno son así más que una minoría, los jóvenes de la Madeleine no son todos gentuza. ¿Porqué los medios de comunicación no hablan de sus problemas y de las cosas que hacen bien los jóvenes por ejemplo en las asociaciones?
Ellos no han inventado el fracaso escolar, el paro y la discriminación. Luchemos juntos para que las asociaciones sean dotadas con más medios y sean escuchadas y para que los jóvenes tengan su lugar en la sociedad. ¡Sigamos construyendo la fraternidad!
No podemos evitar hacernos preguntas y sobre todo los políticos. ¡Basta ya de palabrerías! ¡Ya está bien de menosprecios y de arrogancia! Los jóvenes tienen derecho al respeto. Tienen derecho a una escuela de calidad, a un trabajo estable y remunerado. Nuestros barrios necesitan más educadores o animadores que policías. La represión lleva al fracaso. Nosotros tenemos hoy esta impresión.
Nuestro desafío consiste más bien en promover una sociedad que ofrezca a los jóvenes motivos para vivir y tener esperanza. (Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia).
Evreux. 6 noviembre 2005
- - -> Para más información: mission.ouvriere27@voila.fr
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